dilluns, 21 de maig del 2012

dos nits amb el boss

Rocky Ground Barcelona 2012
My city of ruins Barcelona 2012

el passat dia 17 i 18 de maig, vaig poder gaudir novament de dos concerts espectaculars de Bruce Springsteen en l´estadi olímpic Lluis Companys Barcelona.
De totes les cançons del jefe, hi ha dues versions que vaig quedar marevellat, una es la versió de Muy city of ruins, que va servir per presentar els musics de la banda i un petit hometge a desparescut Big Man i una brutal,espectacular,brillant Rocky Ground.
Ara esperant el pròxim concert, que serà a Montpelier el pròxim 19 de juny,  ens veurem novament per tornar a gaudir i disfrutar d´un altre concert de Bruce Springsteen.
Per cert espectacular Jake Clemons tocant el saxo, rendint aixi un clar homenatge a seu tiet Clarance.
I no menys espectacular va ser el piano Roi Bittan de Racing in the street, Increible.



Hay artistas que conciben su directo como un espectáculo cerrado y sin modificaciones. Un esquema que puede servir para el pop, pero no tanto para el rock, donde el directo incorpora reglas propias. Bruce Springsteen las sigue incluso cuando actúa en estadios, allí donde, se supone, todo debe estar calculado y milimetrado. Y así le salen conciertos con un plus de imprevisión y vitalidad, que mantienen en vilo a sus fans, como el de esta noche en el Estadi Olímpic.
A diferencia del jueves, no ha habido colapso en los accesos y el recinto se ha ido ocupando de forma ordenada. Sin llenarse, como ya se preveía, pero mostrando tres cuartos de entrada.

UNA HORA DE RETRASO

El jueves, el concierto comenzó con 50 minutos de retraso, que se atribuyeron a los problemas en los accesos. Pero esta noche todo ha transcurrido con mucha más fluidez y, en cambio, la actuación se ha retrasado aún más, una hora, sin que por megafonía se escuchara ninguna explicación ni disculpa. El público, con presencia familiar y niños, ha aguantado sin apenas rechistar, aunque cuando el retraso superaba los 50 minutos han comenzado a oírse silbidos de protesta. Por suerte, los miles de personas no estaban ahí para liarla, sino para divertirse.Y eso es lo que han hecho a partir de la primera canción, Night.
Una elección inusual que ha presagiado otros muchos cambios de repertorio respecto al jueves, 11 en total. Solo en el primer tramo, otras dos sorpresas, The ties that bind y Two hearts, a las que han seguido las fijas Wrecking ball, Death to my hometown y My city of ruins. Luego, dos viajes al pasado remoto: Spirit in the night y nada menos que The E Street Shuffle, en su primera interpretación en Barcelona, y con un crescendo frenético con sección de viento.

Las novedades han seguido a discreción con Trapped, Downbound train y aquel Because the night que popularizó Patti Smith. Como la noche anterior, Springsteen ha dedicado Jack of all trades a los indignados y el 15M, y luego ha seguido pervirtiendo el orden del día con Working on the highway.

Correrías callejeras

Con la siguiente sorpresa hablamos de palabras mayores: Racing in the street, tótem de Darkness on the edge of town con melancólico piano de Roy Bittan. Badlands ha cerrado esta vez el repertorio en lugar de abrirlo, y los bises guardaban otra carta inesperada, Ramrod, antes de una tanda final, ahora sí, idéntica al jueves: Rocky ground, Born in the USA, Born to run, Bobby Jean, Dancing in the dark y el homenaje a Clarence Clemons de Tenth avenue freeze out. La primera noche hubo 29 canciones (récord de la gira) y esta noche han sido 28. ¿Y aún hay quien niega que en Barcelona pasa algo especial con Bruce?
(diari Elperiodico)